Lo usual al pensar en ejercicio físico es imaginarnos a alguien corriendo, levantando pesas o practicando algún deporte como el tenis. Existen diferentes disciplinas que a priori pueden parecer "menos ejercicio físico", pero son muy interesantes para la salud. Expertos de la Escuela de Salud de Harvard y diferentes investigaciones científicas avalan la práctica del yoga como una de las mejores opciones para proteger la salud de nuestro corazón.
El yoga es una de las disciplinas que más ha ido sumando adeptos, siendo señalada por organizaciones como la Escuela de Salud de Harvard como una de las mejores opciones para ayudar a nuestro corazón. La práctica del yoga tiene el potencial de mejorar la capacidad aeróbica, la fuerza, la flexibilidad y el equilibrio.
El Dr. Darshan Mehta, director médico del Instituto Benson-Henry de Medicina Mente y Cuerpo, afiliado a Harvard, explica en la plataforma de Harvard que el yoga es más que estirarse y adoptar posturas. Si bien la razón detrás de los beneficios para el corazón del yoga no está del todo clara, las posturas físicas, respiración controlada y respiración ayudan a cultivar la respuesta de relajación.
El estrés es uno de los enemigos de la salud cardiovascular, y de la salud general, por lo que realizar disciplinas físicas que además ayuden a relajarnos es uno de los elementos que sitúan al yoga como excelente protector del corazón. Un metanálisis de 2023 combinó los resultados de 64 ensayos controlados que incluían a casi 17.000 personas.
En comparación con los de los grupos de control que no hacía yoga, las personas que practicaban yoga tenían valores de presión arterial sistólica (el primer número en una lectura) que eran 4,5 puntos más bajos y niveles de colesterol LDL dañino que eran 7,6 puntos más bajos, en promedio.
En las sesiones de esta disciplina milenaria se busca una conexión mente-cuerpo en la que nos centremos en la relajación y alejemos todo lo demás. Ese estado relajado ayuda a dormir mejor, tener mejores emociones y mejora ese lado mental que también es fundamental para la salud de nuestro corazón.